17.02.2015

Adzuki – Palabra del día

Las judías adzuki son una legumbre de uso muy habitual en Japón que sirven como relleno o cobertura para diversos pastelitos y dulces. Estas judías se cuecen y se dejan a remojo en agua azucarada y, a menudo, se trituran hasta formar una pasta conocida en japonés como anko o pasta de judías rojas. Puesto que muchos de nosotros sólo conocemos las legumbres en su versión salada, las judías adzuki pueden suponer un distanciamiento “traumático” del mundo conocido. Las golosinas en las que se utilizan son más bien un gusto adquirido y hace falta vivir unos cuantos años en Japón (a ser posible, sin apenas acceso al chocolate occidental) para llegar a apreciar su sabor.
Engelbert Kaempfer, a quien ya conocemos de anteriores entradas del blog relacionadas con Japón (véanse: katakana ) describe una receta para la elaboración de un pastel que contiene judías adzuki en su libro The History of Japan (La historia de Japón) de 1727. Aquí, escribe: “Las hojas de abrótano se mezclan con arroz hervido y adsuki, o judías rojas espolvoreadas en abundancia, y así se hornean a modo de pasteles”. ¿Era Kaempfer un entusiasta de los pasteles de adzuki? No lo podemos saber a ciencia cierta pero la ausencia de comentarios positivos sobre estos pastelitos nos hace pensar que no.

Una vez te haces a la idea de estar comiendo judías bañadas en azúcar, existen diversas delicias muy divertidas. Los dorayaki consisten en dos bizcochos de forma redonda unidos mediante un esponjoso relleno de judías dulces adzuki. Los dafukumochi también son de lo más interesante: se trata de una bola de arroz que se golpea hasta convertirla en una masa glutinosa que se rellena de judías dulces adzuki trituradas, obteniendo así un aperitivo pegajoso que puede comerse de un bocado. A muchos turistas extranjeros que visitan Japón les cuesta acabarse estos dulces pero, si alguna vez se encuentra en una ceremonia del té tradicional japonesa y su anfitrión le ofrece un pastel wagashi con una excelente presentación (relleno de pasta de judías adzuki) para acompañar el té verde, asegúrese de comerse hasta el último bocado. El amargor del té verde que se sirve en estas ceremonias contrasta estupendamente con el dulzor del adzuki, por lo que merece la pena estar abierto a estos nuevos sabores para poder participar de esta experiencia cultural única.

Si consigue acostumbrarse al adzuki y a sus diferentes texturas, estas judías son una alternativa más ligera a los dulces occidentales, mucho más altos en calorías. Puede que no sea el suvenir más popular que pueda traer de una visita a Japón, pero nunca está de más retar a su paladar.