El 1 de julio de 2017 Estonia asumió la presidencia rotatoria del Consejo de la Unión Europea, 6 meses antes de lo programado originalmente y después del voto por el brexit que obligó al Reino Unido a ceder su turno para centrarse en negociar su salida del club de Bruselas.
A solo días de haber asumido la presidencia, el país báltico viene siendo afectado por conflictos de gobierno y por la posibilidad de estar liderado por un gobierno minoritario o incluso, de enfrentar su colapso y convocar a nuevas elecciones.
Aunque este escenario no sería sentaría un precedente, ya que en 2009 el gobierno checo fue destituido gracias a una moción de censura mientras ocupaba la presidencia de la Unión Europea, el primer ministro de Estonia, Juri Ratas, quien a sus 39 años es el primer ministro más joven de la Unión Europea, ha asegurado a sus colegas de la Unión Europea que «la coalición gobernante es estable y se está tomando muy en serio la presidencia de la Unión Europea». Además, ha vuelto a confirmar las declaraciones que hizo en la reunión de Berlín: «durante nuestra presidencia, nuestro principal objetivo será mantener la cohesión y la unidad dentro de la Unión Europea».
Efectivamente, la función de Estonia estaría centrada en «construir un futuro seguro para todos los europeos» y sus principales prioridades durante su presidencia de seis meses serían: garantizar la seguridad y la protección reforzando la lucha contra el terrorismo y el crimen, y continuando el trabajo para enfrentar la crisis de la migración; promover una Europa inclusiva y sostenible; y facilitar la apertura e innovación de la economía y la sociedad con avances en digitalización y flujo libre de datos.
Y cuando se trata de digitalización, ¿quién supera a Estonia? El país ha sido declarado como una de las sociedades del mundo con más avances tecnológicos, ocupando el primer lugar en el índice de digitalización del Informe de la Unión Europea, y también es líder en el campo del gobierno electrónico y de los servicios públicos electrónicos.
Sin duda, Estonia desarrollará el marco de los servicios digitales y los aspectos digitales de todas las políticas de la Unión Europea durante su mandato, aunque también deberá enfrentar los más grandes desafíos de la legislación inconclusa sobre la reforma de los derechos de autor, la Directiva sobre los derechos de autor en el mercado único digital, y hará un llamado para que la Directiva sobre la privacidad y las comunicaciones electrónicas (ePrivacy) garantice el máximo nivel de protección de la confidencialidad en todos los servicios de comunicaciones electrónicas.
La presidencia estonia está siendo motivada para implementar el Acuerdo de París en su totalidad y para encabezar la transición mundial hacia una energía limpia, promoviendo el paquete de Energía limpia para todos los europeos presentado por la Comisión Europea. También cabe resaltar el proyecto Nord Stream 2, el gasoducto ruso que cruza el Mar Báltico hasta Alemania, para cuyos fines Estonia pedirá un mandato más amplio con el fin de discutir todas las importaciones de gas desde Rusia y enfrentar muchos posibles desacuerdos debido a que es un tema sumamente sensible para algunos Estados miembros y a que las sanciones económicas impuestas a Rusia se han prorrogado seis meses más.
En la presidencia, Estonia también podría enfrentar graves desacuerdos sobre la incorporación de solicitantes de asilo en Europa luego de que en la última asamblea del Consejo Europeo los líderes de estado y de gobierno de la Unión Europea no lograran llegar a un acuerdo sobre la reforma del Sistema Europeo Común de Asilo.
Estonia asume la presidencia en un momento crucial para Europa: la crisis de los migrantes, las amenazas terroristas, las negociaciones del Reino Unido para dejar la Unión Europea, los intentos de Rusia por influenciar en las políticas de la Unión Europea, las próximas elecciones del gobierno federal en Alemania, y como lo dijo Matti Maasikas, viceministro estonio para Asuntos de la Unión Europea: «Cuando veamos hacia atrás en un par de años, tal vez el año 2017 habrá sido el momento más oscuro antes del amanecer… para la Unión Europea ahora es necesario ganar y volver a ganar la legitimidad de nuestros ciudadanos. Es necesario más que nunca».
Siguiendo el lema de la presidencia estonia del Consejo de la Unión Europea: «unidad en el equilibrio», Estonia procurará encontrar un punto de equilibrio entre los distintos intereses europeos para obtener los mejores resultados posibles para todos los ciudadanos de la Unión Europea.
