«La limpieza es equiparable a la grandeza», o al menos es lo que se solía decir. Hoy en día, la limpieza (o la higiene) forma parte de nuestra rutina diaria: limpiarse los dientes, darse una ducha, lavar la ropa, usar desinfectante para manos, desodorante, chicle sin azúcar, toallitas húmedas, ambientador, aspiradores superpotentes, hacemos lo que sea para que los niños no se ensucien, etc.
Los griegos tenían su propia expresión: hugieine tekhne o el «arte de la salud». Hugieine proviene de hugies, «sano», lo que pasó al latín moderno como hygieina y, posteriormente, al francés para crear el término actual «higiene». Puede que para los griegos la higiene fuera el elemento más importante a tener en cuenta desde un punto de vista médico, como escribió Sir John Pentland Mahaffy en 1874: «La medicina griega comenzó con la higiene en lugar de con la patología» (Social Life Greece); es decir, que los griegos se centraban en la forma de mantenerse sanos en lugar de en el diagnóstico de las enfermedades.
Invenciones higiénicas
Inodoro
Sir John Harington inventó el antecesor del inodoro británico moderno y lo instaló en su mansión de Kelston. Lo denominó Ajax, ya que un «jake» era el término coloquial inglés para el inodoro. En 1596 escribió un libro sobre su invento que resultó ser muy popular, pero fue su nombre, John, el que se convertiría en el término coloquial en EE. UU. para este sanitario.
Pasta de dientes
Muchas de las civilizaciones antiguas usaban un tipo de pasta de dientes a base de polvo: cenizas de pezuña de buey, tiza o carbón. Increíblemente, la crema dentífrica no apareció hasta la década de 1850: el polvo se convirtió en crema y, en 1809, Colgate la introdujo en un tubo y no ha habido vuelta atrás.
Pero, toda esta higiene es buena para nosotros, ¿no? Hasta un punto. Las teorías actuales indican que nuestro enfoque actual y riguroso de la higiene (el intento de eliminar los gérmenes de nuestro entorno) podría estar reduciendo el número de gérmenes al que nuestro sistema inmunitario se enfrenta y esto explicaría por qué cada vez más gente sufre alergias. A pesar de las empresas que intentan vendernos la panacea de sus productos químicos, ¿nos estamos volviendo demasiado higiénicos?
