20.06.2017

Propiedad

Propiedad - Palabra del día - EVS Translations
Propiedad – Palabra del día – EVS Translations

¿Qué tan «propio» es poseer una propiedad? Si bien la Declaración Universal de Derechos Humanos reconoce el derecho de toda persona a poseer una propiedad, este es en realidad uno de los derechos humanos más controversiales, sobre todo cuando se trata de uso, protección y restricción.

Por ejemplo, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos no considera que el derecho a la propiedad constituya un derecho absoluto, pero permite que cada estado ejerza su facultad para circunscribir los derechos: «Nadie podrá ser privado de sus posesiones, salvo por motivos de interés público y con sujeción a las condiciones estipuladas por la ley y por los principios generales del derecho internacional.»

El término property (propiedad) se introdujo en el vocabulario inglés a finales del siglo XIV, como un préstamo del francés y con el significado de «atributo, característica, cualidad», registrándose su primer uso en Parson’s Tale de Geoffrey Chaucer, alrededor de 1390.

La primera vez que se definió su significado fue en una traducción de John Trevisa de la antigua enciclopedia De Proprietatibus Rerum, alrededor de 1398, en la que define el término latín proprium, forma neutra de proprius («propio, individual»).

El uso del término como sinónimo de «posesión» surgió simultáneamente, registrándose su primer uso en The English works de John Gower, alrededor de 1400.

Por otro lado, el primer uso de la palabra proprietor (propietario) para designar a una persona que posee algo, se registró en los archivos oficiales del parlamento inglés, de 1473: «Los primeros o antiguos propietarios y titulares del mismo deberán mover o recuperar dichas embarcaciones, mercaderías o una parte de estas.»

El concepto generalizado de «terreno o edificación de propiedad única» recién surgió en el siglo XVIII para referirse originalmente a la propiedad de la tierra, y se usó con ese significado en la traducción de Robinson Crusoe de Daniel Defoe, en 1719.

Si bien la evolución del derecho de propiedad empezó en Inglaterra y en otras partes de Europa durante el siglo XVII, el primer código legal moderno que introdujo el concepto de propiedad y se adoptó en toda Europa, fue el Código Napoleónico, que entró en vigencia en 1804.
El objetivo del Código era eliminar los privilegios por nacimiento, condición y religión, y establecer derechos universales tanto para los bienes personales como los valores inmobiliarios.
Generalmente, los bienes personales también se denominan bienes muebles, mientras que los bienes inmuebles consisten en los valores inmobiliarios y todos sus derechos y obligaciones asociados.

Cabe mencionar que uno de los primeros informes sobre el mercado británico de valores inmobiliarios: Review of the property market for the past month, containing interesting and valuable information to the Solicitors, and to buyers and sellers of land and houses fue publicado en 1875, en The Times.