El radio y un momento clave en la historia de la salud y la seguridad laboral.
El radio es un elemento radiactivo descubierto en París por Marie y Pierre Curie en 1898, justo antes de Navidad. Lo publicaron casi inmediatamente. En menos de una semana, comunicaron su descubrimiento a la Academia de Ciencias francesa y en la edición londinense del 6 de enero de 1899 del Chemical News ya se anunciaba “un nuevo elemento para el que proponemos el nombre de radio”. La palaba proviene del término latino para rayo, radius, e indica la energía que se emitiría a modo de rayos. Gracias al descubrimiento del radio, en 1911 Marie Curie se convirtió en la primera persona galardonada con un segundo Premio Nobel.
En su origen, el radio se usaba en pinturas luminiscentes. La empresa Radium Corporation producía relojes con esferas pintadas con este material para el Ejército de los Estados Unidos, lo que se convirtió en un hito en la historia de la salud y la seguridad laboral. Aunque la empresa había informado a la comunidad médica de que el radio tenía “efectos perjudiciales”, permitió que unos 4.000 empleados trabajaran a destajo pintando los relojes con radio. La mayoría eran mujeres. Dado que los pinceles se deformaban rápidamente, la empresa les recomendó que emplearan la lengua para afinarlos.
¿Cuál fue la consecuencia para estas empleadas? Anemia, fracturas óseas y necrosis de la mandíbula. Cinco de ellas incluso llevaron a la empresa a juicio y recibieron una indemnización que incluía una suma de dinero en metálico y una pensión anual, además de cubrir los gastos legales y del tratamiento médico. Las chicas del radio (Radium Girls), como se las conocía, sentaron un precedente gracias al cual los empleados pueden demandar a los empresarios en caso de existir condiciones de trabajo peligrosas.
Estaba claro que el radio era un arma de doble filo, con ventajas y desventajas. La historia quedó recogida en un artículo del Daily Mail de septiembre de 1903: “El radio, con su poder aparente de emitir calor de continuo sin pérdida de masa, ha abierto la puerta a algo así como un nuevo universo científico”.
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