El osito Teddy, el compañero de sueños por antonomasia del mundo occidental, sólo tiene unos 100 años de historia a sus espaldas. Coincidiendo más o menos en el tiempo este juguete fue diseñado en Alemania por Steiff (que aún hoy sigue fabricando animales de peluche con la misma marca) y en Estados Unidos por Michtom. Ambos se dedicaron a la producción de ositos a comienzos del siglo XX. Es un hecho indiscutible que su nombre se debe a Theodore (o “Teddy”) Roosevelt, el entonces presidente de Estados Unidos. Todo esto tiene su origen en una caricatura sobre una cacería de osos en la que Roosevelt participó y en la que se mostraba un adorable oso.
Al ver esto, Michtom empezó a fabricar el “osito de Teddy”. Como astuto hombre de negocios que era, antes se hizo con los derechos sobre la marca enviando un prototipo al presidente y pidiéndole permiso para utilizar su nombre. Actualmente se venden al año unidades por valor de más de 1.000 millones de dólares. Por si fuera poco, hay museos dedicados al osito Teddy en Inglaterra y en Corea.
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