11.02.2014

Palabra del día : Nirvana o las muy diversas formas de alcanzar la libertad absoluta

William Jones era un polifacético galés con talento para los idiomas. Tras acabar sus estudios en la Universidad de Oxford trabajó seis años como traductor, haciéndose una reputación como experto en todo lo relacionado con Oriente. Al mismo tiempo estudió la carrera de Derecho y más adelante ejerció como juez en Gales y Francia. Trabajó con Benjamin Franklin en un tribunal parisino en un intento fallido por resolver la disputa por las colonias americanas. En 1783 fue nombrado juez del Tribunal Supremo de Bengala y partió hacia la India, donde pasaría el resto de su vida.

Apenas llegó a su nueva patria, Jones fundó la Sociedad Asiática con la intención de fomentar el estudio del continente entre nativos y expatriados. Estos estudios dieron lugar a la publicación de la revista especializada Asiatic Researches, cuya edición de 1801 incluye la primera referencia en inglés al nirvana como un lugar “equivalente a la sala de los honores en la que se supone deben estar los Budas difuntos”. En sánscrito esta palabra significa literalmente “extinción” y describe un estado que surge del ciclo de la muerte y la reencarnación.

Tres décadas más tarde, en 1829, la obra History and Doctrine of Buddhism de Edward Upham describe el nirvana como “dicha eterna”. Ya en el siglo XX este concepto de felicidad absoluta encontró un mayor número de adeptos en el mundo occidental. Hoy en día se calcula que sólo en Estados Unidos hay 1,2 millones de budistas practicantes.

Ahora bien, por más que se extienda por el mundo, el concepto de nirvana sigue teniendo especial importancia en el este de Asia, donde anualmente tiene lugar el Día del Nirvana, un festival que sirve para conmemorar la muerte de Buda. Algunos budistas lo celebran el 8 de febrero, mientras que otros lo hacen el día 15 del mismo mes, y su celebración marca el 80 cumpleaños de Buda y el acto de dejar atrás la existencia física para alcanzar un estado de dicha.

A comienzos de la década de 1990 la palabra “nirvana” adquirió un nuevo significado para los estadounidenses cuando Kurt Cobain eligió este nombre para su banda de música grunge, que pasaría a considerarse la voz de los jóvenes de todo un país. Cobain habló con elocuencia de lo que este concepto significaba para él y para ello citó una entrada del diccionario Webster: “Nirvana significa ausencia de dolor y sufrimiento y aislamiento del mundo exterior, lo que se aproxima bastante a mi definición de punk rock”. Desafortunadamente la longevidad del propio Cobain distó mucho de la definición de nirvana, ya que se quitó la vida con 27 años.

Si le ha gustado la entrada, haga clic sobre “Me gusta” o “Compartir” en Facebook o en cualquiera de nuestras redes sociales.