26.08.2014

Desestabilización – Palabra del día

Desestabilización es un término que tiene connotaciones internacionales. Actualmente se utiliza para describir la situación en el este de Ucrania, Irak o la situación general en el Reino Unido tras los resultados de las elecciones europeas.

Pero su viaje hacia el inglés ha sido largo, desde santos a barcos y hasta políticos. Para volver a sus raíces, empezaremos con la idea de algo estable o fuerte. El término se utiliza en dos de las primeras obras de literatura que aparecieron en inglés. En primer lugar, hacia el año 1200 en la obra South English Legendary, que contiene biografías de santos. Uno de estos, San Oswaldo reinó antes de que la cristiandad fuera realmente estable en el país. También se utiliza el término en la obra Cursor Mundi, uno de los primeros grandes poemas en inglés, escrito alrededor de 1300, un trabajo enorme de unas 30.000 líneas donde se describe la historia del mundo desde una perspectiva cristiana e inglesa.

En él se describe un castillo que permanece estable. Aunque el término se utilizó muchas veces en inglés medieval, tardó casi 600 años en aparecer como verbo. En 1861, el ingeniero y experto naval inglés William Froude, especialista en la estabilidad de los barcos, mejoró el diseño del casco y creó una fórmula relacionada con la proporción entre velocidad y longitud denominada «el número de Froude». Así que sabía de lo que estaba hablando cuando describía un barco que podía ser «estabilizado mediante la anchura de la manga o mediante el lastre almacenado a profundidad». Y todavía tardó más tiempo en aparecer el término «desestabilizar». Cuando lo hizo, fue de forma adecuada, en un libro llamado These Eventful Years recopilado por Encyclopaedia Britannica. Un artículo de W. M. Hughes (político australiano que acababa de dejar el cargo de Primer Ministro) describió la forma en que la creación de un nuevo partido político tiene una «influencia desestabilizadora » en la política de toda la Commonwealth británica.